Médicos y enfermeras disponibles por cada 1.000 habitantes en los países de la Ocde: Colombia al fondo

El promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos es de 3,6 médicos y 8,8 enfermeras por 1.000 habitantes

Compartir

Cuando un país dispone de suficientes médicos y enfermeras por cada 1.000 habitantes, la salud de su población tiende a reflejarlo en menor mortalidad evitable, diagnósticos más oportunos y, sobre todo, menores tiempos de espera.

Sin embargo, la nueva infografía elaborada a partir de las Estadísticas de Salud de la OCDE 2023 revela que esa realidad dista mucho de ser homogénea. El panorama muestra profundas desigualdades internas en el club de las economías industrializadas, y deja a Colombia en la posición más baja del listado con apenas 2,3 médicos y 1,4 enfermeras por cada millar de ciudadanos.

Panorama de cantidad de médicos y enfermeras en la OCDE

El promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos es de 3,6 médicos y 8,8 enfermeras por 1.000 habitantes. Es decir, la media de enfermeras cuadruplica la cifra colombiana y los doctores superan la marca local por más de un profesional. Dentro de ese amplio espectro hay dos bloques claramente diferenciados:

  • Líderes en capacidad asistencial. Noruega encabeza el ranking con 5,0 médicos y 17,9 enfermeras, seguida de cerca por Suiza (4,3 y 18,0) e Islandia (3,9 y 15,4). Australia, pese a tener una plantilla médica de 3,8, alcanza la notable proporción de 17,9 enfermeras. Estas naciones combinan una oferta robusta de especialistas con un cuerpo de enfermería que multiplica la atención primaria y reduce la sobrecarga hospitalaria.

  • Países con déficit moderado. Al medio de la tabla aparecen potencias como Estados Unidos (2,6 y 12,0) y Japón (2,5 y 11,8), que, aunque cuentan con menos doctores per cápita, compensan gracias a la amplia cobertura de enfermería. Portugal es un caso atípico: registra una alta densidad de médicos (5,3) pero apenas 7,1 enfermeras, lo que ilustra la complejidad de equilibrar ambas profesiones.

Le puede interesar:  Estos productos llegarán en mayor cantidad y más fácil con la ruta de la seda

En el extremo opuesto se sitúan Turquía (1,9 médicos y 2,4 enfermeras) y Colombia (2,3 y 1,4), con rácios que se asemejan más a los estándares de economías en transición que a los de los miembros de la OCDE.

Médicos y enfermeras disponibles por cada 1.000 habitantes en los países de la Ocde: Colombia al fondo

La escasez de médicos y enfermeras puede traducirse en:

  1. Aumento de listas de espera. Menos profesionales por habitante significa menor capacidad para cubrir consultas, cirugías y controles posquirúrgicos de manera oportuna, sobre todo en áreas rurales donde la distribución ya es desigual.

  2. Sobrecarga laboral. Un personal reducido debe asumir turnos más extensos y mayor número de pacientes, elevando el riesgo de errores médicos y el desgaste profesional.

  3. Cobertura desigual. Los especialistas tienden a concentrarse en las grandes ciudades, mientras que en regiones apartadas la relación personal-paciente es aún más baja que el promedio nacional.

Si Colombia aspira a converger con el baremo de la OCDE, necesitaría duplicar su planta de médicos y multiplicar por seis la de enfermeras. Dicho de otra forma, debería pasar de algo más de 120.000 doctores y 73.000 enfermeras actuales (estimaciones derivadas de su población proyectada) a cerca de 260.000 galenos y 430.000 profesionales de enfermería.

Le puede interesar: Exportaciones de libros colombianos: cifras y panorama

Radiografía regional y lecciones de los líderes

La entrega de equipos médicos por parte de Aris Mining busca fortalecer la atención médica en el Nordeste Antioqueña.
Foto: Cortesía

Los países nórdicos, con su destacada dotación de médicos y enfermeras, han apostado por tres estrategias clave:

  • Inversión sostenida en educación sanitaria. Programas universitarios subsidiados y plazas de residencia amplias aseguran que la oferta académica satisfaga la demanda social.

  • Salarios competitivos y ambiente laboral. El reconocimiento profesional y los incentivos económicos reducen la fuga de talento y atraen personal extranjero.

  • Descentralización de servicios. Centros de salud locales potentes y un sistema de enfermería comunitaria descargan a los hospitales de casos de baja complejidad.

Le puede interesar:  Presidente Gustavo Petro asiste a misa de entronización del Papa León XIV y fortalece alianzas internacionales

Aplicar parcialmente ese modelo exigiría en Colombia ajustar su financiación pública, fomentar becas condonables para estudios de medicina y enfermería en zonas con escasez crítica y diseñar un plan nacional de retención de talento que evite la migración de profesionales a mercados más competitivos.

Le puede interesar: ¿Por qué ha sido tan largo y difícil el juicio contra Álvaro Uribe Vélez?

Última hora

Te recomendamos

Le puede interesar