En los últimos días en la capital de Ecuador se inauguró el Metro de Quito en el que tuvo participación la Empresa Operadora Metro de Medellín Transdev que es el resultado de la alianza entre el Metro de Medellín y la transnacional Transdev, con sede en Francia.
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“Desde el primero de diciembre la Empresa asume el reto y la responsabilidad de movilizar cada día a un promedio de 400.000 personas que se transportarán en 18 trenes, los cuales rodarán por una vía férrea subterránea compuesta por 15 estaciones, 5 de ellas intermodales”, manifestó el Metro de la capital de Antioquia en un comunicado.
Este nuevo medio de transporte en territorio ecuatoriano tendrá 15 estaciones (5 de ellas intermodales) en un recorrido que es 22 km entre el norte y sur de la capital. Además, el primer usuario que se presentó en cada parada cortó una cinta en los accesos al tren subterráneo, compuesto por seis coches y de 109 metros de longitud.
El inicio de la operación del Metro en Quito generó polémica por la construcción del proyecto en Bogotá
La inauguración de este servicio en Ecuador generó reacciones en Colombia, especialmente en Bogotá, donde en este instante se encuentra la construcción de la línea 1 y 2 del Metro.
“Un lindo y eficaz metro. Subterráneo, como se debe en zonas densas. De calidad, preservando el entorno urbano. Remplazando buses y no alimentador de ellos. Una planificación urbana respetada y completada por cada alcalde sucesivo. Así se construye ciudad”, manifestó Carlos Moreno, profesor en IAE Sorbonne en su cuenta de X (antes Twitter) y que fue republicado por el presidente Gustavo Petro en sus redes sociales.
Un lindo y eficaz metro.
Subterráneo, como se debe en zonas densas. De calidad, preservando el entorno urbano. Remplazando buses y no alimentador de ellos. Una planificación urbana respetada y completada por cada alcalde sucesivo,
Así se construye ciudad. https://t.co/1J3hydrycP— Carlos Moreno | IAE-Paris Sorbonne (@CarlosMorenoFr) December 4, 2023
Por su parte, días después de ganar las elecciones presidenciales, Petro sostuvo que los dos proyectos en Bogotá y Quito iniciaron casi al mismo tiempo, pero ellos lo lograron terminar debido a que en la capital de Colombia se tomó la decisión de suspender el metro subterráneas, lo cual generó grandes pérdidas económicas.
“La simple decisión de no continuar el proyecto que ya tenía estudios terminados le cuesta al país y a Bogotá, 16 billones de pesos adicionales. Una lección de lo que significa las malas decisiones políticas”, aseveró el jefe de Estado en julio del 2022.
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