Miguel Uribe Turbay ha logrado posicionarse como una de las voces más visibles de la oposición en el Senado colombiano. Su estilo directo, su presencia en redes sociales y su cercanía con el uribismo han llevado a muchos ciudadanos a preguntarse si existe algún vínculo familiar entre él y el expresidente Álvaro Uribe Vélez. Sin embargo, la respuesta es no.
Panorama general: Miguel Uribe pertenece a otra de las grandes casas políticas de Colombia: la familia Turbay. Es nieto del expresidente Julio César Turbay Ayala, quien ocupó la Casa de Nariño entre 1978 y 1982 como jefe de Estado por el Partido Liberal. La conexión política no solo es de sangre sino de legado: Turbay Ayala fue una figura clave en la historia reciente del país, recordado tanto por su lucha contra la guerrilla como por las controversias alrededor del Estatuto de Seguridad.
Su madre, Diana Turbay, fue una reconocida periodista y directora de la revista Hoy por Hoy. En 1991, Diana fue secuestrada por el grupo narcoterrorista conocido como «Los Extraditables», liderado por Pablo Escobar. Murió trágicamente durante un fallido operativo de rescate del Ejército Nacional, convirtiéndose en un símbolo del costo humano del conflicto armado en Colombia.
El padre de Miguel Uribe, Guillermo Uribe, no tiene relación alguna con el expresidente Uribe Vélez. La coincidencia de apellidos ha sido fuente de confusión, especialmente entre sectores del electorado más joven, quienes asocian el activismo conservador del senador con el legado uribista.
Miguel Uribe Turbay: entre el legado liberal y la afinidad con el uribismo
Por qué es importante: No obstante, Miguel Uribe ha construido su propia carrera política. Fue el secretario de Gobierno de Bogotá durante la administración de Enrique Peñalosa y luego candidato a la Alcaldía de la capital en 2019. Aunque no ganó, se consolidó como una figura visible del centro-derecha y desde el Senado ha sido un férreo opositor del presidente Gustavo Petro.
En la actualidad, hace parte del partido Centro Democrático, fundado por Álvaro Uribe Vélez, con quien mantiene afinidad ideológica pero no lazos de sangre. Su liderazgo ha sido clave para conectar a sectores conservadores urbanos con posturas más institucionales, alejadas del populismo de derecha.