Tras una intensa sesión que se extendió hasta las 11 de la noche, la plenaria de la Cámara de Representantes aprobó en su octavo y último debate el texto de la reforma al Sistema General de Participaciones. Paralelamente, la Comisión Primera del Senado dio luz verde a la Reforma Política en tercer debate con 11 votos a favor, consolidando un importante avance en los esfuerzos por modernizar el sistema electoral colombiano.
Modernización del sistema electoral: detalles de las reformas clave en Colombia
La Reforma Política, propuesta por el Gobierno nacional, tiene como principal objetivo combatir la corrupción en el sistema electoral y garantizar un proceso confiable, imparcial y transparente. Además, busca fortalecer a los partidos políticos como instrumentos de participación ciudadana y representación democrática.
Este proyecto de acto legislativo también responde a compromisos adquiridos en el Acuerdo de Paz de 2016, alineándose con las recomendaciones de la Misión Especial Electoral de 2017.
El articulado aprobado se centra en tres ejes principales:
- Financiación predominantemente estatal de las campañas políticas: Se busca reducir la influencia de dineros privados en los procesos electorales, promoviendo la transparencia y la equidad en la contienda política.
- Listas cerradas con equidad de género: Las listas para aspirantes al Congreso, Asambleas Departamentales y Concejos Municipales deberán garantizar la participación igualitaria de hombres y mujeres, fomentando una mayor representatividad en las corporaciones públicas.
- Creación de una autoridad electoral independiente: Este organismo será responsable de supervisar los procesos electorales y sus magistrados serán elegidos a partir de ternas presentadas por las altas cortes y el Congreso. La medida busca fortalecer la independencia de esta entidad frente a las fuerzas políticas.
Durante el debate en la Comisión Primera del Senado, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, resaltó la importancia de esta reforma para restaurar la confianza ciudadana en las instituciones democráticas. “Esta es una oportunidad para actualizar las reglas de juego del sistema electoral y garantizar su transparencia.
Sin embargo, quiero reiterar que estas disposiciones no se aplicarán antes del 2026, ya que este proyecto contempla un régimen de transición”, puntualizó el ministro.
No obstante, el proceso no ha estado exento de críticas. La representante Katherine Miranda, de la Alianza Verde, propuso una ponencia de archivo argumentando que la reforma podría afectar la estabilidad fiscal del país. Aunque su iniciativa fue rechazada, puso sobre la mesa la preocupación sobre el impacto económico de la financiación estatal de las campañas.
La reforma política ahora pasará a la plenaria del Senado, donde enfrentará su cuarto debate. En esta etapa, los congresistas, junto con expertos y académicos, podrán realizar ajustes y fortalecer el articulado. Aunque el camino por recorrer es aún largo, este avance es considerado un hito en la modernización del sistema político colombiano.
De ser aprobada en su totalidad, la reforma podría transformar significativamente el panorama electoral y político de Colombia. La introducción de listas cerradas y la paridad de género representarán un cambio estructural en la participación política, mientras que la financiación estatal busca minimizar riesgos de corrupción y desigualdad en las campañas.
Con estas reformas, el Gobierno espera construir un sistema electoral más inclusivo y transparente, que refuerce la confianza de los ciudadanos en la democracia y siente las bases para un futuro político más equitativo en Colombia.
Lea también: Valle del Cauca fortalece la seguridad con millonaria inversión aprobada por la Asamblea Departamental