El desarrollo del sistema ferroviario en Colombia avanza como una prioridad del Gobierno nacional, con miras a mejorar la logística y competitividad del país. La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), en cabeza de su presidente Francisco Ospina Ramírez, reveló que el próximo 13 de febrero de 2025 se definirá el futuro de una de las principales vías férreas del territorio nacional.
El futuro del sistema ferroviario colombiano: una fecha clave para 2025
Durante el XXI Congreso de Infraestructura, organizado por la Cámara Colombiana de la Infraestructura en Cartagena, Ospina destacó que Colombia cuenta con 3.533 kilómetros de red ferroviaria, de los cuales solo el 31% está en operación activa. Esto equivale a 1.111 kilómetros funcionales, lo que refleja el potencial desaprovechado del sector.
“La reactivación férrea no consiste solamente en reparar las vías. Es necesario recuperar conocimientos técnicos, establecer talleres de mantenimiento, garantizar la intermodalidad y generar confianza entre los empresarios para que vean al tren como una alternativa viable, confiable y económica”, afirmó el presidente de la ANI.
Inversiones y proyectos clave
El Gobierno nacional ha destinado $570.000 millones entre 2023 y 2025 para la recuperación de la infraestructura ferroviaria existente, priorizando corredores estratégicos como Bogotá–Belencito y La Dorada–Chiriguaná. Además, se han proyectado inversiones de $42 billones para nuevos desarrollos.
De este presupuesto, $2,1 billones se emplearán en recuperar tramos vitales como Bogotá–Belencito y Yumbo–Caimital en el Valle del Cauca. Los restantes $40 billones se destinarán a dos proyectos de gran envergadura: la conexión entre Buenaventura y Palmira, y un enlace ferroviario entre Bogotá y la red vial central, ambos en etapas avanzadas de prefactibilidad.
“Esperamos que estas adjudicaciones avancen en 2025 para que en 2026 estemos listos para ejecutar las obras. Queremos un sistema ferroviario que no solo transporte carga, sino que también fomente el turismo, como el corredor Palmira-Valle del Cauca”, explicó Ospina.
Uno de los principales beneficios de la reactivación ferroviaria será la reducción de costos logísticos. Se estima que el transporte por tren permite ahorros del 20% al 26% en comparación con otros medios.
Actualmente, la línea Chiriguaná–Santa Marta tiene una capacidad de 100 millones de toneladas de carga, mientras que el tramo La Dorada–Chiriguaná espera alcanzar 200.000 toneladas este año y proyecta llegar a 5 millones de toneladas en la próxima década gracias a las nuevas inversiones.
Ospina subrayó que el éxito del proyecto depende de un crecimiento progresivo y sostenible. “Esto no es un proyecto a corto plazo. Es un esfuerzo para posicionar al sistema ferroviario como un pilar de la logística nacional, mejorando la competitividad y asegurando una infraestructura que se mantenga en el tiempo”, destacó.
Fecha clave para la infraestructura
El próximo 13 de febrero de 2025 será decisivo para la infraestructura ferroviaria del país, ya que se definirá la adjudicación de importantes intervenciones, como el proyecto La Dorada–Chiriguaná. Con estos avances, el Gobierno busca consolidar un sistema ferroviario moderno y eficiente que impulse la economía nacional y ofrezca soluciones sostenibles al transporte de carga y pasajeros.
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