En la última edición de los 50 Mejores Restaurantes de América Latina 2024, tres restaurantes colombianos han logrado posicionarse en el top 10, destacándose como referentes de la gastronomía en la región. Este reconocimiento, otorgado por The World’s 50 Best Restaurants, celebra la excelencia culinaria, la innovación y el compromiso con los ingredientes locales, consolidando a Colombia como un destino gastronómico de primer nivel.
El Chato, Celele y Leo: restaurantes de Colombia entre los 10 mejores
El Chato: Vanguardismo con raíces locales
Dirigido por el chef Álvaro Clavijo, El Chato se encuentra en el corazón de Bogotá y representa la fusión entre creatividad y sostenibilidad. Con platos que exaltan ingredientes locales, como corazones de pollo con suero costeño o mejillones con arroz de coco, Clavijo busca redefinir la experiencia gastronómica colombiana. Desde su fundación en 2017, El Chato ha logrado reconocimiento internacional gracias a su compromiso con los pequeños productores y su capacidad de innovar respetando las raíces culturales del país. Este año, escaló posiciones en el ranking, consolidándose como uno de los mejores de la región.
Celele: Una oda al Caribe colombiano
Ubicado en Cartagena y liderado por Jaime Rodríguez y Sebastián Pinzón, Celele celebra la biodiversidad y la riqueza cultural del Caribe colombiano. Este restaurante ha cautivado a los comensales con un menú que explora los sabores tradicionales de la región, reinterpretados con técnicas contemporáneas. Platos como la pesca del día con hierbas nativas o el suero costeño con fermentos de frutas locales destacan por su autenticidad y creatividad. Celele no solo es un homenaje a la cocina caribeña, sino también un ejemplo de cómo la gastronomía puede contar historias y preservar el patrimonio cultural.
Leo: Gastronomía que conecta con el territorio
Bajo la visión de la reconocida chef Leonor Espinosa, Leo se ha convertido en un referente global de la alta cocina sostenible. Su propuesta combina ingredientes ancestrales y técnicas tradicionales con un enfoque innovador, ofreciendo una experiencia gastronómica que conecta al comensal con las raíces del territorio colombiano. Espinosa, además, ha trabajado estrechamente con comunidades indígenas y campesinas para rescatar y promover ingredientes olvidados, lo que le ha permitido posicionar a Leo como uno de los mejores restaurantes no solo de América Latina, sino del mundo.