Tras meses de ataques y una campaña contra la inmigración, Trump intentará cambiar su discurso y mejorar su imagen haciendo una visita a México.
Por: Cristian Camilo Muñoz @CristianMunozma
Donald Trump ha demostrado una vez más que cuando de estrategias se trata, no duda al momento de moverse en todo el escenario político. Horas antes de su discurso contra la inmigración, el candidato por el partido republicano tendrá una reunión con Enrique Peña Nieto, Presidente de México, al parecer la visita relámpago tendría como objetivo ganar popularidad en un sector de la población que ve al candidato como una amenaza.
“Creo en el diálogo para promover los intereses de México en el mundo y, principalmente, para proteger a los mexicanos donde quiera que estén” fue el argumento con el que Peña Nieto justificó la reunión con Trump.
Durante el año largo que lleva en campaña, Trump ha calificado a los migrantes procedentes del país vecino como “criminales” y hasta “violadores” y ha criticado duramente el tratado de libre comercio con México y Canadá por el daño que afirma hace en los trabajadores estadounidenses.
Durante su última visita a la Casa Blanca, Enrique Peña Nieto respondió que no opina ni se involucra en la campaña electoral de Estados Unidos “El próximo presidente electo encontrará en México y en su gobierno una actitud positiva, propositiva y de buena fe para engrandecer la relación entre ambas naciones”
El pasado viernes, la Presidencia de México invitó a ambos candidatos estadounidenses y Trump vio allí una oportunidad de oro para limpiar su imagen.
La visita ha generado diferentes opiniones, por un lado el Gobierno de Peña Nieto se ha mostrado benevolente con quien en otro momento ofendió a los mexicanos y por otro la opinión pública ve con desfavorabilidad la posibilidad de que Trump llegue a la presidencia por sus intensas campañas en contra de los inmigrantes.
Las encuestas han mostrado que sus ataques a los migrantes le alejaban de las corrientes mayoritarias del voto. Consciente de ello, Trump ha protagonizado en las últimas semanas un lento giro y ha intentado congraciarse con aquellos a los que insultó.