Por: Redacción Política
Luis Pérez Gutiérrez se ha caracterizado por la fuerte inversión en el componente de seguridad, además de garantizar mediante todas las vías posibles el orden público y la protección de los menos favorecidos.
Manejar un departamento como Antioquia de por sí no es fácil, máxime cuando se tiene una situación económica difícil a nivel local y el gobierno nacional tampoco está muy bien de finanzas. Todas las maniobras que el actual gobernador ha hecho para poder llevar a cabo con eficiencia el desarrollo del 25% un gobierno, han sido premiadas incluso por instancias nacionales e internacionales, como por ejemplo el triunfo que hace poco logró al conocerse que Antioquia tenía el mejor Plan de Desarrollo según el DNP y aliados internacionales.
Sus posiciones firmes y claras le han merecido un reconocimiento por parte de aliados y no aliados, la férrea defensa de todo el territorio en asuntos como el proceso de paz, la venta de Isagén, la disputa con el Chocó por Belén de Bajirá, la Feria Aeronáutica, entre otros. Envía cartas al presidente Santos con frecuencia, en las que le pide explicaciones para algunos propósitos, como también lo felicita o le reclama por hechos que no son de conveniencia para el departamento.
Los proyectos “detonantes”, como el mismo los ha bautizado, han logrado crear un ambiente de positivismo e imaginación, que parecía estar mandada a recoger hace algunos meses. El que los Antioqueños volvieran a pensar en un ferrocarril, en la construcción de nuevas vías, en infraestructura para la movilidad sostenible, además de una verdadera injerencia en fines de seguridad que permitan recorrer el departamento sin miedo; son elementos que han permitido crear una nueva relación y fomentar confianza gobierno-ciudadano.
Desde qué Álvaro Uribe Vélez fue gobernador de Antioquia, ningún otro gobernante había logrado semejante repunte en las encuestas y en el primer año. Uribe Vélez alcanzó en su gobierno una favorabilidad del 90% en el primer año de mandato, mientras que los siguientes gobernantes subieron como en el caso de Luis Alfredo Ramos, pero otros como Sergio Fajardo cayeron 10 puntos en el primer año de gestión. Hoy Luis Pérez Gutiérrez alcanzó una favorabilidad de 81% según la ultima encuesta de Invamer Gallup, firma que periódicamente recoge la percepción de las personas sobre gestión pública y temas de coyuntura. Gutiérrez estaba en la ultima medición con un crecimiento continuo; inició con un 61%, luego subió a 73% y ya, en el onceavo mes de gobierno, llegó al 81%
Ahora el gobernador Luis Pérez se enfrenta a un cambio de más del 60% de su gabinete, una tarea no muy fácil pues saber nominar es vital para el funcionamiento de cualquier gobierno. Los secretarios que se han ido y que posiblemente saldrán, según fuentes de 360 son; Adolfo León Palacio, Enrique Olano Assuad, Carlos Mario Montoya, Laura Emilse Marulanda, Hector Jaime Garro, Jaime Garzón, James Gallego y Mauricio Parody. Algunos de los anteriores se fueron por motivos de retiro forzoso, otros por aspiraciones políticas, mientras que otros si por asuntos netamente de rendimiento y episodios de orden jurídico y legal, que pueden perjudicar el normal funcionamiento de la administración departamental. Los interesados en llegar han intentado poner a sonar a distintos nombres, pero lo único cierto es que el hermetismo del gobernador es absoluto. Solo un nombre; Carlos Mario Rivera, está en un 90% confirmado como nuevo secretario de salud.
Por ultimo, una de las piedras que necesita colocar el gobernador Luis Pérez antes de que se acabe el año, son los recursos para que activen el inicio de las grandes obras como el Ferrocarril de Antioquia. Esto se buscará mediante la titularización de las utilidades futuras del proyecto Hidroitüango, una mega-obra que garantizará en buena medida la situación fiscal del departamento, además de convertirlo en una potencia energética mucho más robusta.
El reto para el gobernador es no bajar la guardia, seguir con el mismo ímpetu y liderazgo, además de poder aprovechar bien esta oportunidad de conformar un equipo responsable, eficiente, de confianza y con altas capacidades.