En un contexto donde la falta de actividad física y la adopción de posturas perjudiciales son moneda corriente, se encienden las alarmas sobre el impacto en la salud de la espalda. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente 350 millones de personas en todo el mundo no realizan suficiente actividad física, lo que contribuye a la debilidad muscular y afecciones en la columna.
En este escenario, QUIROVIDA, centro especializado en el cuidado de la columna, advierte sobre los riesgos asociados a prácticas como el sedentarismo, la falta de pausas para cambiar de postura, la mala posición al sentarse, el estrés y la exposición prolongada a vibraciones, especialmente para aquellos que pasan largos periodos al volante.
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Recomendaciones para cuidar la salud de la espalda
Detalles: Estos hábitos nocivos pueden resultar en una incapacidad funcional del cuerpo, limitando la realización de tareas cotidianas e incluso afectando la vida social. Débora Teixeira, especialista en quiropráctica de QUIROVIDA, enfatiza la importancia de realizar pausas activas y otras actividades físicas para fortalecer y estirar la espalda, especialmente para aquellos con rutinas sedentarias.
Ante esta problemática, se brindan recomendaciones clave:
Mantener una rutina de sueño saludable, evitando el consumo de cafeína y alimentos pesados antes de acostarse, ajustando la iluminación del dormitorio y limitando el uso de dispositivos electrónicos.
Optar por prendas de vestir cómodas para evitar cambios posturales perjudiciales, como el uso excesivo de tacones en mujeres, que pueden afectar la columna, tobillos y rodillas.
Transportar la billetera en el bolsillo delantero del pantalón para evitar desajustes en la posición de la columna y la cadera al sentarse, previniendo así dolores crónicos.
Panorama general: Teixeira destaca la importancia de la comunicación adecuada entre el cerebro y el resto del cuerpo, afectada por alteraciones en la columna, lo que puede conducir a un control motor deficiente y dolor crónico. En este sentido, un tratamiento quiropráctico adecuado puede contribuir a mejorar la propiocepción, la relajación muscular y la función neurológica, aliviando el dolor y promoviendo el bienestar.
En conclusión, adoptar hábitos saludables y buscar tratamientos adecuados son clave para prevenir y tratar afecciones en la espalda causadas por factores como el sedentarismo y las malas posturas. La atención temprana a los síntomas relacionados con la columna puede evitar complicaciones y mejorar la calidad de vida a largo plazo.
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