En un año donde casi la mitad de la población mundial se enfrenta a elecciones ejecutivas o legislativas, el Pew Research Center ha publicado un estudio revelador sobre la satisfacción y insatisfacción democrática en 26 países. Este informe destaca que la satisfacción ha disminuido notablemente en los últimos años, especialmente en naciones de altos ingresos.
Panorama general: En 2024, el Pew Research Center llevó a cabo más de 900 entrevistas en cada uno de los 26 países seleccionados, utilizando métodos telefónicos o en persona. Los participantes fueron consultados sobre su satisfacción con el funcionamiento de la democracia en su país, con opciones de respuesta que iban desde «muy satisfecho» hasta «nada satisfecho». Es importante notar que los resultados excluyen a quienes no respondieron y que los porcentajes pueden no sumar 100% debido al redondeo.
La satisfacción global con la democracia ha disminuido en nueve de los doce países donde esta pregunta se ha formulado sistemáticamente desde 2021.
Satisfacción e insatisfacción democrática por país:
- Estados Unidos: 31% satisfechos, 68% insatisfechos.
- Tailandia: 64% satisfechos, 35% insatisfechos.
- Singapur: 80% satisfechos, 19% insatisfechos.
- Suecia: 75% satisfechos, 24% insatisfechos.
- Perú: 11% satisfechos, 89% insatisfechos.
- Colombia: 21% satisfechos, 77% insatisfechos.
- Otros países, como Alemania y Canadá, también han visto una caída de dos dígitos en la satisfacción democrática.
Diferencias regionales:
- Europa: Suecia muestra una alta satisfacción (75%) comparada con Grecia (22%).
- Asia-Pacífico: India y Singapur tienen altas tasas de satisfacción (77% y 80%, respectivamente), mientras que Japón solo tiene un 31% de satisfacción.
- América Latina: Una gran mayoría de chilenos, colombianos y peruanos expresan insatisfacción con sus democracias.
Por qué es importante: El Pew Research Center señala que la satisfacción con la democracia está estrechamente vinculada a las percepciones sobre el desempeño económico y las opiniones sobre el partido gobernante. En muchas naciones, las percepciones negativas sobre la economía han contribuido a una visión desfavorable de la democracia.