ETB y el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) confirmaron este miércoles que llegaron a un feliz termino sobre el predio Graham Bell en una mediación que contó con la participación de la Secretaría Jurídica del Distrito y la Contraloría Distrital.
“A través de la transacción, llegamos a un acuerdo que beneficia tanto al IDU como a ETB y evita que hallazgos de la Contraloría Distrital terminen en procesos fiscales. El éxito de este acuerdo evidencia la importancia de impulsar los mecanismos alternativos de solución de conflictos para demostrar que, con voluntad, se pueden llegar a descongestionar los despachos judiciales y no entregarle a un tercero una disputa entre dos entidades distritales”, señaló William Mendieta, secretario Jurídico de Bogotá.
¿Cómo empezó el conflicto?
En 1973, el IDU decidió como parte de pago entregar el predio Graham Bell a la empresa ETB por unos servicios prestados por parte de la compañía de telecomunicaciones. Si bien el inmueble fue entregado a la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB), quienes se hicieron cargo de los gastos de mantenimiento y operación, nunca la posición fue escritura a nombre del beneficiario.
Tras varios diálogos de ambas partes en los años siguientes, se llegó al acuerdo de escriturar el predio a nombre de ETB. Sin embargo dicha situación nunca se dio, en 2017, el IDU solicitó formalmente la devolución, a lo que la empresa de telecomunicaciones accedió con una petición de que se le pagara el costo de mantenimiento y remodelación que tuvo durante el periodo que fue parte de la compañía en mención.
Razón por la cual luego de varias intervenciones en mesas de dialogo entre ambas partes, respaldadas por la Secretaría Jurídica del Distrito y la Contraloría Distrital, ETB y el IDU llegaron lograr un acuerdo en el que se restituye el predio a Instituto de Desarrollo Urbano y esta deberá pagar la suma de $8.900 millones de pesos por gastos de mantenimiento y mejoras al inmueble.
“Para ETB es muy satisfactorio anunciar que después de 50 años de conflicto hemos llegado a un acuerdo que beneficia a las dos entidades, y por supuesto a la ciudad, con el acompañamiento de la Secretaría Jurídica y la Contraloría Distrital, lo que da solidez a la decisión que tomamos”, señaló Alexandra Correa, secretaria general de ETB.