Los proyectos de infraestructura en el Caribe colombiano están transformando el entorno urbano y económico de ciudades clave como Barranquilla, Cartagena y Santa Marta, marcando un antes y un después en el desarrollo regional. Luis Fernando Reina, Gerente de Prodesa para la Regional Caribe, y Oscar Manco López, Chief Financial Officer de Trust Investment, ofrecen sus análisis sobre estos avances, resaltando tanto los logros como los retos que enfrentan en términos de sostenibilidad, desarrollo urbano y bienestar social.
Luis Fernando Reina destaca el impacto positivo de los desarrollos de infraestructura en el Caribe como Serena del Mar y Alameda del Río, que han sido motores del crecimiento urbano en la región. «Estos proyectos han transformado no solo la infraestructura física, sino también la calidad de los servicios y la oferta residencial, impulsando el bienestar de los residentes y revalorizando las ciudades», subraya Reina. Para él, la modernización de la infraestructura ha sido esencial para crear ciudades más competitivas y atractivas para nuevas inversiones.
Además, «la modernización del puerto de Barranquilla, uno de los más importantes de la región Caribe, facilita el comercio internacional y atrae inversiones y turismo, consolidando a la ciudad como un hub logístico clave. Esto mejora el transporte de mercancías, genera empleos y fomenta el crecimiento de sectores industriales y de servicios en torno al puerto», afirmó Reina.
Por su parte, Oscar Manco López hace énfasis en la relevancia de las mejoras en infraestructuras clave como carreteras, puertos y aeropuertos. «La inversión en infraestructura ha sido vital para potenciar la economía local. Estas mejoras no solo han dinamizado sectores clave, sino que han generado nuevas oportunidades de negocio, aumentando la competitividad regional», sostiene Manco López.
Además, Oscar Manco López destaca que los puertos han sido fundamentales para el crecimiento económico de la región Caribe. Los puertos han permitido que empresas multinacionales y transnacionales se establezcan en ciudades como Barranquilla, Cartagena y Santa Marta, favoreciendo el comercio internacional y la logística. Este auge en el sector portuario ha elevado la contribución de la región Caribe al Producto Interno Bruto de Colombia, pasando del 7-6% a un 13%. Esto muestra que los puertos no solo facilitan el comercio de mercancías, sino que también han sido clave en atraer inversiones y generar empleo.
Sostenibilidad Ambiental: un desafío en marcha
El compromiso con la sostenibilidad en la infraestructura en el Caribe se ha convertido en un pilar fundamental en el desarrollo de los proyectos de infraestructura. Reina subraya que en Prodesa se están implementando prácticas sostenibles para mitigar el impacto ambiental, incluyendo tecnologías limpias y diseños de edificios que respetan el entorno natural. «Creemos firmemente en un desarrollo que no comprometa el medio ambiente y que pueda ser sostenible a largo plazo», explica Reina.
Sin embargo, Manco López plantea una visión más crítica respecto a los desafíos ambientales que aún persisten en la región. «A pesar de los esfuerzos, la región enfrenta graves problemas de contaminación y deterioro de los recursos naturales. Es necesario adoptar un enfoque más riguroso y contundente para cumplir con los estándares internacionales de sostenibilidad», advierte Manco López, señalando que los esfuerzos actuales no son suficientes para enfrentar la magnitud de los problemas ambientales de la región.
Además agregó que «el impacto ha sido positivo, sin duda, pero todavía hay esfuerzos muy grandes e importantes que debemos hacer y acelerar. Hablo específicamente del tema de infraestructura social. En la región Caribe no contamos, por ejemplo, con centros de eventos, a pesar de que tenemos la recepción de eventos particulares como la eliminatoria del Mundial y cosas por el estilo».
Infraestructura en el Caribe: impacto en la calidad de vida, el desarrollo social
En cuanto a los beneficios para la población, Reina destaca cómo estos desarrollos han mejorado la calidad de vida en las ciudades del Caribe, generando entornos urbanos más agradables y funcionales. «Los proyectos de infraestructura, como puertos, carreteras y aeropuertos, son fundamentales para transformar ciudades, elevando su dinamismo y conectividad. La modernización del puerto de Barranquilla, uno de los más importantes de la región Caribe, facilita el comercio internacional y atrae inversiones y turismo, consolidando a la ciudad como un hub logístico clave.», afirma Reina.
Manco López, sin embargo, alerta sobre las desigualdades que estos proyectos de infraestructura en el Caribe pueden acarrear. «El crecimiento económico derivado de estas inversiones no ha sido uniforme. Existen notables diferencias en el acceso a los servicios y oportunidades que se crean, lo que deja a ciertos sectores de la población rezagados», argumenta. A su juicio, es crucial implementar políticas más inclusivas para asegurar que el desarrollo beneficie a toda la población, especialmente a las comunidades más vulnerables.
Para Reina, la clave del éxito en estos proyectos de infraestructura en el Caribe ha sido la capacidad de adaptarse a las particularidades del mercado local. «Cada uno de nuestros proyectos se ha planificado con el objetivo de atender las necesidades específicas de los residentes, creando un desarrollo armonioso y sostenible», comenta.
Manco López complementa esta visión de la infraestructura en el Caribe, pero enfatiza la importancia de una planificación urbana integral que no se limite a proyectos aislados al los temas de infraestructura en el Caribe. «Es fundamental que exista una estrategia global de desarrollo urbano que promueva la conectividad entre diferentes áreas de las ciudades y garantice una distribución equitativa de los beneficios. Solo así se podrá lograr un crecimiento más equilibrado y funcional», explica.
Colaboración público-privada y responsabilidad social
Reina pone de relieve el compromiso de Prodesa con la responsabilidad social, destacando los programas comunitarios y de capacitación que acompañan sus desarrollos inmobiliarios. «Nuestro compromiso no es solo con la infraestructura, sino también con el desarrollo social de las comunidades. A través de nuestras iniciativas buscamos mejorar las condiciones de vida de las poblaciones locales», señala.
Además señala, «Los proyectos de infraestructura, como puertos, carreteras y aeropuertos, son fundamentales para transformar ciudades, elevando su dinamismo y conectividad. La modernización del puerto de Barranquilla, uno de los más importantes de la región Caribe, facilita el comercio internacional y atrae inversiones y turismo, consolidando a la ciudad como un hub logístico clave».
Por su parte, Manco López destaca la necesidad de una colaboración más estrecha entre el sector privado y las autoridades locales. «Las alianzas público-privadas son esenciales para superar los desafíos y asegurar que los proyectos de infraestructura beneficien a toda la sociedad. Solo a través de una colaboración efectiva podremos garantizar un desarrollo equitativo y sostenible».
Finalmente, sobre la infraestructura en el Caribe «El tema de las alianzas público-privadas tiene un papel sumamente importante. La Ley 1508, que se lanzó en el año 2012, es la ley que permite vincular el capital privado con el desarrollo público o con finalidades públicas».
La clave para un desarrollo urbano exitoso y equilibrado radica en la implementación de estrategias más inclusivas, sostenibles y coordinadas, que permitan superar los retos actuales y aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece el crecimiento en la región.