Entre la furia de la naturaleza y nuestro cambio energético

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Estamos viviendo un año de cambios, de momentos fuertes que serán recordados en la historia del mundo.


Más allá de si la madre tierra nos está hablando por el pésimo trato ambiental que le damos, está la energía planetaria que se maneja a su antojo perjudicando no solo a la naturaleza sino a la humanidad misma. Esa humanidad que se cree con poder y sabiduría, esa que cree que el dinero puede con todo.

La energía, esa que no encuentras en libros de física es un componente de nuestras vidas. Como dijo Einstein “Todo es energía en el universo. La energía no se crea ni se destruye, solo se transforma». Por ende, nuestro cuerpo y todo lo que lo rodea tiene una energía tan abismal que es capaz de transformar de un segundo a otro nuestro estado de ánimo y hasta nuestra salud.

Ponte a pensar en algo, hay días que simplemente estamos más cansados que otros, que no nos provoca ni caminar. Esto seguramente no se deba a algo físico o alguna enfermedad, esto seguramente es cuestión del universo y su alineación con astros y planetas. Si, así es, aunque suene muy raro nuestra fecha de nacimiento, el movimiento planetario y cósmico es una energía vital que influye directamente sobre nuestros comportamientos y actitudes día a día. Es tal que el simple hecho de que haya luna llena influye en la manera como nos levantamos, es decir, fijo en la luna llena muchos de nosotros estamos tristes, angustiados o extremadamente felices.

Ahora bien, si analizamos esto con los cambios que se han presentado este año en nuestro planeta, podremos comprender que el eclipse que vivimos, los terremotos y los devastadores huracanes son cambios energéticos muy fuertes que mueven y nos cambian tanto a nivel físico como a nivel espiritual.

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Veamos que significan cada uno de ellos desde la energía planetaria:

– Terremoto: es una energía poderosa capaz de sacudir de manera exorbitante una ciudad, un país y hasta un mundo entero. Estos causan pérdidas materiales y aún más importante, vidas humanas. Desde la filosofía, los terremotos son vistos como cambios, y obvio, después de la devastación llega un renacer, pero más allá de lo material pensemos en la parte espiritual. Estas fuertes sacudidas son un apoyo a la tierra para que esta crezca, para que nazca una nueva conciencia y así resurja intensamente con las bendiciones de un nuevo mundo. Es una energía planetaria que se manifiesta para pronunciarse ante nosotros los humanos como un empujón hacia nuestro cambio de conciencia, de vida.

– Eclipse: son momentos energéticamente fuertes, pueden causar dolores de cabeza y hasta nauseas. Estos se deben aprovechar al máximo para escribir, agradecer y reorganizar nuestras vidas. Es un momento que cada uno debe ver como una nueva luz después de la oscuridad.

“Un eclipse de Sol puede simbolizar la desaparición momentánea de nuestro potencial interior, sentimos ausencia de poder personal, de voluntad, de capacidad para visualizar metas personales. En cambio, un eclipse lunar nos fuerza a comprobar nuestro pasado (Luna) a la luz de la experiencia actual, y, puede relacionarse con confusión y momentos particularmente propicios para esconder, ocultar, fomentar o expandir «sombras» de manifestación emocional[1]”. Explica la astróloga Patricia Kesselman para El Clarín.

– Huracán: es un fuerte viento que se lleva todo a su paso, que devasta ciudades y que es capaz hasta desaparecer pedazos de tierra. Esto a nivel energético es una sacudida dura que nos da el universo, que nos brinda lo océanos para cambiar situaciones difíciles que tenemos en nuestras vidas.

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Así mismo, estos tres fenómenos naturales se complementan entre sí, generando cambios importantes a nivel material, físico y espiritual. Es por eso que un eclipse al cambiar la atmósfera de la tierra, puede ocasionar huracanes, ya que estos dependen en cierta medida de la temperatura de las aguas, y todos estos cambios energéticos de la luna, el sol y las aguas, hacen que las placas tectónicas se manifiesten generando grandes terremotos.

“Los desastres naturales son un desequilibrio en la naturaleza, producto de nuestros comportamientos, de nuestra des-armonía, nuestro desequilibrio como humanos”.

[1] Tomado textual del sitio web: https://www.clarin.com/entremujeres/astrologia/eclipses-lunaciones-mes-leo-significados_0_SJUamLGI-.html

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