Por: Rafael Nieto
2.400.000 votos le sacaron Duque y Marta Lucía a Petro. Triunfo contundente que, al examinarse con más detalle, muestra diferencias.
En el consolidado, Duque y Ramírez obtuvieron el 54% y Petro el 42%, doce puntos de diferencia. Pero la composición de la votación no solo no es uniforme sino que tiene sustantivas variaciones geográficas.
En la Costa Caribe, Duque ganó en Bolívar, Cesar, Córdoba, Guajira y Magdalena, y solo pierde en Atlántico y Sucre, pero el total de votos en la región fue prácticamente igual: 1.719.102 frente a 1.713.664. En el surocidente barrió Petro. Ganó en Cauca, Chocó, Nariño, Putumayo y Valle. Petro alcanzó 1.631.073 votos y Duque 1.176.805, 454.268 votos de diferencia.
En Bogotá Petro también gana con 1.884.869 votos (53%) contra 1.447.685 (41%), invirtiendo a su favor los doce puntos nacionales. El salto de Petro entre primera y segunda vuelta fue de 786.391 votos. El de Duque de 463.754. Pero, como en el país, el voto fue muy distinto en cada área de la ciudad: en el norte y en el oriente ganó Duque, en el occidente hay un empate, el sur y el suroccidente votaron por Petro.
El resto del país apoyó decididamente a la Gran Alianza por Colombia. La frontera con Venezuela fue abrumadora: Norte fue el departamento con más votación a favor de Duque: el 78% y apenas el 18% por Petro. En Casanare fue 73% a 24%, Arauca 65% a 32%, Vichada 64% a 33%, Santander 60% a 35%. En la costa Caribe, el Cesar fue donde más ventaja tuvo Iván: diez puntos. Solo en Norte y en Santander se le sacaron 619.998 votos a Petro.
El eje cafetero se volcó a Duque: Caldas 66% a 28%, Quindío 63% a 31%, Risaralda 62% a 33%, más de 30 puntos promedio a favor de Iván, y 361.967 votos. Tolima y Huila tienen un comportamiento similar: en Huila el 64% contra 31%, en Tolima 66% a 30%. En Boyacá, 55% a 41,5%, y en Cundinamarca, 56,5 a 39%, las diferencias son un poco menores.
Antioquia hizo la gran diferencia. Un 72,5% votó por Duque y solo un 22% por Petro, con 1.285.513 votos a favor de Iván, tres veces la ventaja que el exalcalde sacó en Bogotá. Los antioqueños le bastaban a Duque para ganar.
Una observación final: entre las grandes ciudades, Duque gana Medellín y Bucaramanga, pero pierde Bogotá, Barranquilla, Cali y Cartagena.
Aunque la derrota fue monumental, Petro sacó ocho millones de votos. De esos, 3,5 son de izquierda dura, los de la consulta, y 1,3 blandos. 3,2 millones son nuevos, posiblemente no de izquierda que, sin embargo, terminaron votando por odio a Uribe o por hastío con la corrupción y los partidos tradicionales o porque quieren “renovación”. Si no queremos otro susto en el 22, el nuevo gobierno debe concentrarse en la lucha contra la corrupción y en la política social. Y debe hacerlo con excelencia.