Países como Dinamarca, Holanda, Irlanda y ahora Francia y Alemania decidieron no seguir vacunando con el preparado de AstraZeneca, por motivo de algunos efectos adversos graves que se están presentando en los ciudadanos. Esto explica la farmacéutica para defenderse.
Por: Redacción 360 Radio
Los países mencionados y otros como Italia, Estonia, Lituana, Noruega, Islandia y Tailandia decidieron suspender la vacunaciones con el preparado desarrollado por AstraZeneca en conjunto con la Universidad de Oxford, por la creación de coágulos de sangre en los pacientes a quienes se le suministró la vacuna.
Ante esto, la farmacéutica británico-sueca aseguró que no existen pruebas que demuestren que la aplicación de su vacuna trae consigo este efecto secundario.
De acuerdo con Ann Taylor, jefe médica de la compañía, “el número de casos de coágulos de los que se ha informado entre este grupo es inferior a la media que se puede esperar en la población en general”. La directiva dijo esto basándose en los datos de las más de 17 millones de personas de Europa que ya han recibido al menos una dosis de la vacuna.
Y por esto, AstraZeneca asegura que a causa de la “naturaleza de la pandemia” se está prestando mayor atención a los casos aislados y excepcionales, pero que están trabajando arduamente para que sus preparados cumplan con las condiciones tanto de seguridad y como de efectividad.
Así, a pesar de que poco más de una decena de países han suspendido el uso de esta vacuna, la Organización Mundial de la salud (OMS) explicó que no hay motivos para no emplear la vacuna de AstraZeneca, pues no se han establecido relaciones directas entre la vacuna y la aparición de los coágulos de sangre en algunos ciudadanos.