El ánimo de los hogares colombianos mostró una mejora significativa en noviembre, cuando el Índice de Confianza del Consumidor alcanzó un balance de 17%, su nivel más alto desde enero de 2015. Así lo reveló la más reciente Encuesta de Opinión del Consumidor publicada por Fedesarrollo, que evidenció un repunte sostenido frente a los registros observados a lo largo del último año.
El resultado del undécimo mes de 2025 representa un aumento de 3,4 puntos porcentuales frente a octubre y responde, principalmente, a una percepción más favorable sobre el futuro económico y a una mejor lectura de la situación actual. De acuerdo con el centro de pensamiento, el Índice de Expectativas del Consumidor subió 2,3 puntos porcentuales, mientras que el Índice de Condiciones Económicas avanzó cinco puntos porcentuales en comparación con el mes anterior.
Optimismo de los hogares impulsa la confianza del consumidor a su mejor nivel en casi diez años
Ambos indicadores también alcanzaron niveles que no se observaban desde hace varios años. El índice de expectativas registró su mejor balance desde junio de 2018, mientras que el de condiciones económicas marcó su punto más alto desde junio de 2015, lo que sugiere una recuperación más amplia del sentimiento de los consumidores.
En la comparación anual, la mejora es aún más evidente. Frente a noviembre de 2024, el índice de confianza del consumidor presentó un aumento de 22,7 puntos porcentuales, al pasar de terreno negativo a uno claramente positivo. Un comportamiento similar se observó en las expectativas de los hogares, que repuntaron 24,5 puntos porcentuales, así como en la percepción sobre las condiciones económicas, que creció 21,1 puntos porcentuales en los últimos doce meses.
Al analizar las respuestas específicas, Fedesarrollo destaca que la percepción sobre la situación económica del hogar se mantiene en niveles elevados, aunque con una leve moderación frente a octubre. En cuanto al consumo, se registró una mejora relevante en la opinión sobre si es un buen momento para adquirir bienes durables como electrodomésticos o muebles, una señal clave para la dinámica del gasto de los hogares.
El comportamiento por ciudades también refleja un panorama positivo. Las cinco capitales analizadas registraron balances favorables en noviembre. Barranquilla lideró el indicador, con un repunte significativo frente al año anterior, seguida por Cali y Bucaramanga. Medellín, aunque mostró el nivel más bajo entre las ciudades evaluadas, se mantuvo en terreno positivo.
Por nivel socioeconómico, el optimismo se concentró principalmente en los hogares de ingresos medios y bajos, que registraron balances positivos en confianza del consumidor. En contraste, el segmento de mayores ingresos fue el único que se mantuvo en terreno negativo, aunque con una brecha menor frente a meses anteriores.
Finalmente, la encuesta evidenció una mayor disposición a comprar bienes durables y una mejora importante en la intención de adquirir vehículos. Aunque este último indicador continúa en terreno negativo, el avance frente al mes anterior y frente a noviembre de 2024 sugiere una recuperación gradual del consumo, en línea con una percepción más favorable sobre la evolución de la economía.
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