Las secretarías de Educación locales de Norte de Santander, Cauca y Arauca han notificado que miles de familias dejaron de inscribir a sus hijos este año por la falta de dinero, miedo al contagio por COVID y problemas de seguridad.
Por: Redacción 360 Radio
En Arauca, en medio del retorno a la presencialidad de las instituciones educativas, se ha venido dando una dificultad evidente en lo que concierte al transporte escolar con el que deben contar los colegios para garantizar el acceso a la educación de los alumnos que, en muchos casos, residen en los sectores rurales.
Desde el 24 de enero cuando más de 65.000 estudiantes de Arauca regresaron a la presencialidad hay padres de familia que consideran que la medida es apropiada y es necesario el regreso a la presencialidad.
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En Norte de Santander se ha dado una gran deserción escolar en el inicio del 2022, pese a que hay disponibles 12.000 cupos para primaria y secundaria. Los problemas económicos que enfrenta un gran porcentaje de las familias en el departamento, por el desempleo y la informalidad, en medio de la pandemia, que obligó a varios padres a retirar sus hijos de las escuelas.
En Cauca la deserción escolar se registra con mayor frecuencia en los grados de décimo y once, cuyas edades oscilan entre 15 y 18 años. En Popayán crece la deserción escolar por temor que genera el coronavirus, en poblaciones como Argelia, los niños quieren ir a estudiar, pero la violencia no lo permite.
Según la secretaria de Educación de Cauca, Leyla Muñoz, en el 2022 hay 4.000 niños menos matriculados, siendo Popayán el municipio con el registro más alto de deserción.
En municipios como Argelia, la violencia es la que genera la deserción escolar, pues en los últimos días se han presentado hechos de violencia que generan temor en la población.