Entre las fallas presentadas por la megaobra, 29 tendrían presunta incidencia disciplinaria y 8 tratamiento penal, según la Contraloría.
Por: Redacción 360 Radio
Durante la auditoría de cumplimiento al proyecto hidroeléctrico de Ituango, la Contraloría General estableció alrededor de 35 hallazgos en el proceso de licenciamiento ambiental y en el desarrollo constructivo, además de ausencia de estudios minuciosos a lo largo de la ejecución del mismo.
La entidad afirmó que “empresas Públicas de Medellín, Epm, tomó decisiones, a juicio de este organismo de control, sin el sustento técnico suficiente. Es el caso del taponamiento de los túneles de desvío inicialmente diseñados, frente a los cuales no construyó las compuertas que permitieran el control del cauce. Una decisión basada más en criterios económicos por el alto costo de las compuertas”,
Además, añadió que debido a la cantidad de incumplimientos por parte de Epm hacia los deberes respectivos de la licencia ambiental, no se explica por qué la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, no ha expedido ni una sola sanción en su contra.
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En respuesta, la Anla rechazó algunas de las afirmaciones realizadas por la Contraloría, señalando que algunas conclusiones exceden la competencia de la organización.
Por su parte, Empresas Públicas de Medellín replicó que “desde el principio de la contingencia, EPM ha manifestado su interés en que se aclaren todas las dudas que se tengan sobre la obra. Por ello, y como es su deber y su voluntad, ha suministrado a las autoridades y los organismos de control la información requerida para que se adelanten las revisiones sobre la gestión y la ejecución del proyecto”.
Por último, el ente de control destacó que la construcción de Hidroituango no tuvo la participación ciudadana que debía, pues jamás se llevó a cabo una consulta popular que era necesaria por tratarse de una zona en la que habitan comunidades.