Con la aprobación de la reforma laboral el 18 de junio de 2025 en el Senado colombiano, se introdujeron cambios significativos en las condiciones de trabajo, particularmente en los recargos por horas extra, dominicales, festivas y nocturnas. Uno de los puntos más relevantes para millones de trabajadores es el ajuste en el valor de la hora extra diurna y nocturna, así como la modificación del horario en el que inicia la jornada nocturna, que ahora comienza a las 7:00 p. m.
Este cambio no solo impacta el bolsillo de los empleadores, sino también las expectativas salariales de los trabajadores, especialmente aquellos que laboran en sectores como comercio, salud, transporte y vigilancia.
Jornada nocturna desde las 7 p. m. y más beneficios: claves de la reforma laboral 2025
Uno de los principales avances de la reforma es el adelanto del inicio del recargo nocturno, que pasa de las 9:00 p. m. a las 7:00 p. m. Esto significa que cualquier trabajo realizado después de esa hora, incluso si no es extra, debe pagarse con un recargo del 35 % sobre la hora ordinaria.
Además, el valor de la hora extra diurna sube un 25 %, mientras que la hora extra nocturna tiene un recargo del 75 %. En domingos y festivos, las tarifas se incrementan aún más: una hora extra diurna debe pagarse con el doble de la tarifa ordinaria, y una hora extra nocturna se paga con un recargo del 150 %.
Por ejemplo, si el salario mínimo en 2025 es de $1.423.500, la hora ordinaria equivale a aproximadamente $6.470 a partir del 15 de julio, cuando entra en vigencia la nueva jornada laboral de 44 horas semanales. Con esta base, una hora extra diurna costará cerca de $8.088 y una hora extra nocturna rondará los $11.323. Si se trata de trabajo dominical o festivo, los valores pueden llegar hasta los $16.176 por hora, dependiendo del horario.
¿Cuándo aplica la nueva jornada laboral?
Otro punto importante es la reducción progresiva de la jornada semanal. A partir del 15 de julio de 2025, la jornada laboral pasará de 46 a 44 horas semanales. Esto influye directamente en el valor de la hora ordinaria, ya que al trabajar menos horas por el mismo salario, cada hora vale más.
El objetivo del Gobierno es llegar a las 42 horas semanales en 2026, sin afectar el salario mensual de los trabajadores, lo que fortalece el poder adquisitivo de cada hora trabajada y refuerza los beneficios en caso de que se trabaje tiempo adicional.
