Aunque la Corte ve con buenos ojos el “Fast Track” condiciona el uso de este mecanismo a la refrendación vía consulta popular de los acuerdos.
Este lunes la magistrada, María Victoria Calle, registró la ponencia que definirá el futuro de la implementación del nuevo acuerdo de Paz con las FARC. En el documento la jurista pide mantener vivos el “Fast Track” y las facultades extraordinarias al presidente de la República al momento de tramitar leyes que desarrollen normativamente al acuerdo de Paz.
Sin embargo, la ponencia no acepta la solicitud de declarar inexequible el artículo 5 del Acto Legislativo, donde se condiciona la entrada en vigencia de dicho Acto a que el acuerdo tenga refrendación popular. Lo cual significa que el “Fast Track”, que es permitir que las leyes y Actos Legislativos se tramiten en 4 y no en 8 debates, se pueda usar únicamente si la refrendación del acuerdo se da a través de las urnas.
Esto significa que si la Corte no acepta esta proposición el Gobierno tendría que convocar a una nueva consulta popular en el caso que quiera utilizar el mecanismo que está diseñado para la implementación de los acuerdos en la mitad del tiempo que se tarda un trámite ordinario.
Ahora el Gobierno tiene un nuevo traspiés en su búsqueda de refrendar el nuevo acuerdo a través del Legislativo, ahora se abre una nueva posibilidad a que el pueblo colombiano sea quien al final decida si acepta o no lo que pactaron Gobierno y FARC en La Habana, y lo cual ya fue firmado.
Por su parte el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, ha indicado que el “Fast Track” no es un capricho y ha sido enfático en decir que es necesario, “El ‘fast track’ no es un capricho, no es un deseo de colocar contra la pared a quienes se oponen. Es una necesidad” afirmó De la Calle.