Un grupo de científicos holandeses hizo un estudio sobre los efectos de la llamada «contaminación covid» en la vida silvestre de ecosistemas de todo el mundo. Los resultados son devastadores.
Por: Redacción 360 Radio
Después de que un pez perca atrapado en un guante de látex fuera descubierto por un grupo de científicos de la Universidad de Leiden en Holanda, los académicos lo declararon como la primera víctima holandesa de los desechos del coronavirus y decidieron iniciar una investigación para saber cómo estos residuos están afectando a los animales de todo el mundo.
Se trata de un estudio publicado por la revista Animal Biology, el medio oficial de la Real Sociedad Zoológica Holandesa, que abarca animales del mundo entero, desde Brasil hasta Malasia y busca identificar en qué zonas pueden ser más afectados por los desechos de la guerra contra el Covid-19.

Guantes de látex, tapabocas desechables o de poliéster y vísceras de plástico terminan en todos los ecosistemas del planeta: desde el mar, hasta los bosques e incluso los desiertos.
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Pero no es todo. Este grupo de científicos descubrió que aves, erizos, cangrejos, tortugas y gaviotas se quedan atrapados en restos de tapabocas. Además, otros animales se los comen, incluso los perros; los expertos informaron que un simio y un pingüino tenían en sus estómagos fragmentos de estos residuos.

Otros animales incluso han comenzado a construir sus hábitats con esta basura, pues los científicos holandeses reportaron un nido de ave focha, muy común en los Países Bajos, construido con tapabocas y guantes que fueron desechados incorrectamente.
Cabe mencionar que este estudio se llevó a cabo con la colaboración de personas del común, recolectores de basura, observadores de aves, veterinarios, centros de rescate y fotógrafos que hicieron sus reportes del impacto de la “contaminación covid” en la vida silvestre del mundo entero.