Una particular situación que se ha comentado como vox populi, pero que se ha constatado a media que pasan las semanas, ocurre en Barranquilla en este año. El actual alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, y el exmandatario de los barranquilleros, Jaime Pumarejo, vienen en un distanciamiento que toma fuerza y que nació antes de que este último terminara su gestión en la Alcaldía.
Esta situación se presentó por varias razones. Unas muy de formas y manejos de Pumarejo, que si bien en un principio del Gobierno habían molestado a Char, nunca quiso detenerse en ellas y prefirió más bien mirarlo como un tema de las formas de ser. Luego de eso empezó a observar en temas de ejecución, manejo de personal, contratación, utilización de las herramientas de la ciudad, en la que el alcalde dijo que no comparte y que estos hechos van en contra del modelo que han tratado de sostener en la ciudad.
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Aunque se guardó ante mucho tiempo esas consideraciones luego esto se fue filtrando, muchas personas se dieron cuenta y empezaron a relevar ese tipo de distancias, a las cuales Pumarejo no se quedó quieto e inició a enviar mensajes indirectos que generaron un cisma en Barranquilla, sobre todo en la cúpula, pues en la capital del Atlántico que todo se mueve entre pocos polos: un club, un colegio, pocas empresas privadas y la administración.
De manera que esto detono hace aproximadamente un año y medio, Pumarejo no fue a la posesión de Char, quien no ha ido a la obra insignia del exalcalde: la Ciénaga de Mallorquín. El actual mandatario se concentró en estos casi tres meses a poner la “casa en orden”. Lo que pasa es que no ha querido hacer un Libro Blanco como realizó Alejandro Eder en Cali o Federico Gutiérrez en Medellín. El alcalde de Barranquilla ha preferido llevar este asunto con una procesión en silencio.
Obviamente Char le ha dicho a sus funcionarios que de encontrarse cosas que sean realmente relevantes que se las hagan saber a las autoridades, pero este medio ha podido constatar que hay una situación muy difícil administrativamente y financieramente, y en parte ha hecho que esta administración este retrasada para iniciar muchas cosas, aunque encontró en eso alguna razón de porque la Alcaldía de Barranquilla pasada no hizo muchas cosas que debía realizar.
En temas de infraestructura, muchos frentes y proyectos estaban paralizados. A muchos proveedores del Distrito les debían varios pagos y de igual manera a contratistas de la Alcaldía. De manera que para Alejandro Char fue una sorpresa encontrar una situación que no se veía en Barranquilla desde hace mucho tiempo.
Esto creó un malestar social y político en quien han sido los colaboradores más cercanos de la administración durante muchos tiempos, debido a que los pagos no se cumplieron. Allí hubo unas tenciones que de poco a poco se han intentado solventar: problemas de basuras, iluminación, seguridad, etc, por lo que había una parálisis en la ciudad.
Dice el entorno más cercano a Char que todo lo que encontró fue tan grave que los comentarios personales pudieron pasar a un tercer plano, porque lo que más importaba era la situación de la ciudad.
Alejandro Char ha realizado varios proyectos en la Alcaldía de Barranquilla con el propósito de recuperar la ciudad
Desde ese momento se han realizado varios proyectos, como tapar más de 2.600 huecos, se reactivó el programa de reactivación escolar, a los adultos mayores se les volvió a dar un subsidio; el cual estaba interrumpido desde la mitad del 2023, se le pagaron a proveedores, contratistas y empleados de planta de la Alcaldía de Barranquilla, se reactivó el tren Tajamar turístico de las Flores, se llevaran a cabo las ampliaciones de la calle 30, entre otros.
Esto ha hecho que en la casa Char se esté reevaluando muchos frentes, en donde se analice que tipo de personas tienen y que confianza están generando en quien les han delegado encabezar proyectos como la Alcaldía de Barranquilla para continuar con sus legados.
Claramente hay un mea culpa, han recibido críticas y si pusieron a Pumarejo deben asumir sus consecuencias. Esto ya lo reconocen muy privadamente.
Otras informaciones dicen que desde el segundo año de Gobierno, Pumarejo y Char rompieron relaciones, pero que hace un año y medio se detonó la crisis mayor. Esto ha generado que se defina el Pumajerismo y que siga el Charismo, quienes con Char y quienes con Pumarejo, quien puede volver a intentar a ser alcalde de Barranquilla, pero sin ser del equipo del actual mandatario de los barranquilleros.
Los problemas en temas de energía fue otra situación que no se manejó bien. Además, a Pumarejo le critican que dejó perder los Juegos Panamericanos que se iban a realizar en el 2027 en la ciudad. Le cuestionan que le guste más el centralismo, y que se desconectó de las bases de la capital del Atlántico.
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