Luego de varias horas de debates el senado votó a favor de destituir a Dilma Rousseff de la presidencia
Por: Cristian Camilo Muñoz @CristianMunozma
A partir de este miércoles y como se veía venir desde el inicio de la crisis en diciembre de 2015, la mandataria de Brasil Dilma Rousseff ha sido destituida definitivamente de su cargo como Presidenta de Brasil. La era de la primera mujer en ocupar el Palacio de la Alborada ha terminado tras 13 años del mandato del Partido de los Trabajadores.
Durante la votación, 61 senadores la encontraron culpable, mientras que 20 votaron por su inocencia. De acuerdo a la Constitución brasileña se necesitaban 54 votos de 81 para poder destituir a la Presidenta. Sin embargo, a la mandataria le fueron reconocidos sus derechos políticos.
8 años de inhabilidad le fueron imputados a Rousseff, así lo establece la legislación brasileña.
Quien asumiría definitivamente el cargo a partir de hoy sería Michel Temer, el cual asumió la Presidencia desde mayo de este año cuando Rousseff fue suspendida temporalmente. Así, con la destitución de la mandataria, se daría fin a más de 70 horas de debates, donde las acusaciones y las lágrimas estuvieron a la orden del día.
Los problemas de Rousseff habrían comenzado con un informe de tres abogados que denunciaron a la Presidenta hace alrededor de nueve meses por maquillar las cuentas públicas a base de hacer trampas con el presupuesto mediante un mecanismo de préstamos públicos.
En su última presentación como presidenta ante el Senado, esta economista que fue guerrillera marxista en su juventud y sufrió torturas en la última dictadura (1964-1985) se mostró altiva y dijo que solo unas elecciones directas pueden juzgar a un jefe de Estado. Y señaló que ella será quien quedará «del lado correcto de la historia».