Este domingo 1 de diciembre, los colombianos sentirán un nuevo ajuste en el precio del ACPM (Aceite Combustible para Motores Diesel), que aumentará $400 por galón. El incremento fue confirmado por el Ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, quien explicó que se trata de la segunda fase del acuerdo alcanzado con los gremios de transportadores tras el paro camionero que paralizó al país en septiembre de este año.
Aumento del ACPM: repercusiones en el sector transporte y en los precios de los productos
El ajuste total acordado es de $800 por galón, y este domingo se aplicará la segunda etapa del incremento, cuyo objetivo es estabilizar la situación financiera del sector transporte, afectado por altos costos operativos. Según Camacho, este será el último aumento relacionado con este acuerdo, y no se prevén más incrementos a menos que se logren acuerdos estructurales en el sector.
El acuerdo que rige este incremento fue firmado en el marco de la negociación con los transportadores, quienes solicitaron apoyo tras el paro nacional que afectó la circulación de carga en todo el país.
Como parte de la negociación, se acordaron también mesas de trabajo con el fin de abordar los problemas laborales y económicos que afectan al sector. En este sentido, el Ministerio de Trabajo y el Congreso están trabajando en una reforma laboral que garantice condiciones más justas para los transportadores, que incluye la revisión del sistema de costos, especialmente para los pequeños transportistas.
A pesar de los esfuerzos del Gobierno, las reacciones del sector han sido mixtas. Nidia Hernández, presidenta de Colfecar, destacó la importancia de continuar con las mesas de trabajo con el Gobierno, pero también subrayó los efectos negativos del aumento.
«Es necesario seguir avanzando en la agenda pactada para garantizar que los transportadores no se vean asfixiados por el aumento de costos, ya que muchos pequeños transportadores ya están en una situación límite», indicó Hernández.
Además del aumento en el ACPM, existe el riesgo de un nuevo impuesto al carbono que podría agregar $487 adicionales al precio del diésel, lo que incrementaría aún más los costos operativos del sector. «El problema no es solo el aumento de los costos, sino que todo esto se acumula en un mismo periodo, lo que resulta en una carga insostenible para los transportadores», señaló Hernández.
Este ajuste no solo afectará directamente al sector del transporte, sino que también tendrá repercusiones en los precios de los fletes y, por ende, en el costo final de los productos de consumo masivo.
El aumento en los costos de transporte podría traducirse en una subida de precios en productos como alimentos, combustibles y otros bienes esenciales, impactando el bolsillo de los consumidores.
Actualmente, el precio promedio del galón de ACPM en las principales ciudades del país es de $9.848, y con el aumento de $400, se prevé que el precio promedio alcance los $10.248. Las nuevas tarifas de diésel por ciudad serán las siguientes: Bogotá: $10.556, Medellín: $10.561, Cali: $10.677, Barranquilla: $10.244, Cartagena: $10.208.
Este incremento forma parte de un proceso de reajustes que buscan equilibrar las condiciones del sector transporte, pero que podrían generar un impacto directo en la economía colombiana. El Gobierno sigue comprometido en avanzar con los acuerdos laborales, pero la carga financiera para los transportadores y consumidores se mantiene como un tema de preocupación a nivel nacional.
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